lunes, 28 de diciembre de 2009

HAREMOS UN DESCANSO EN LA JORNADA

Haremos un descanso en la jornada,
un alto justo al borde del camino,
gozando de la sombra tan ansiada,
saciando nuestros labios con el vino.

Muy cerca está el arado con la azada,
el río que nos lleva hasta el molino,
la dulce cabañita deseada.
y en ella, el tibio fuego tan divino.

Haremos que nos canten las cigarras
y entonen esa eterna melodía,
constante, que palpita y que desgarra.

Entonces marcharemos de regreso
volviendo hacia la eterna travesía
y unidos nuestros labios en un beso.

Rafael Sánchez Ortega ©
28/12/09

1 comentario:

Anónimo dijo...

Bonito este soneto romántico, cerca a la tierra,
cerca del alma,
cerca del tiempo,
juntos al alba.
Enhorabuena,Lns